Action House, escape room en Madrid | Hay Vida Después de la Oficina

Amor y odio a la fusta en una de las mejores salas de escape de Madrid

Cada vez que recomiendo este escape room a alguien digo la misma frase: nunca he hecho un escape que me haga reír tanto. Y las dos cosas son verdad: lo recomiendo siempre, y en la sala Un Caso Perdido de Action House Room Escape, en Madrid, yo lloraba de la risa. Literalmente.

La verdad es guardo muy buen recuerdo de este escape. Lo hice con unos amigos de Zaragoza el verano pasado, en uno de esos findes que se escapaban a Madrid y aprovechábamos para visitar alguna sala. Igual era la exaltación del momento por tener a mis amigos conmigo y que el fin de semana estuviera saliendo tan rodado, pero disfruté la experiencia muchísimo (y eso que me levanté con una contractura épica en el cuello, sí, hice el escape casi torcida).

Y es que cuando mis amigos confirmaron su visita me puse a buscar una sala con buenas críticas en Madrid y dentro de lo caótico que es eso (porque hay decenas y decenas de salas diferentes) me fijé en esta por un detalle que todavía no habíamos probado: era una sala de escape con actores. ¿Actores?, nos preguntamos. Hay que decir que estoy hablando del verano de 2017, donde, aunque ahora sea difícil de concebir, el mundo de los escape room en una ciudad como Madrid estaba despertando. Pues eso, ¿actores?, dijimos. Y esa pregunta nos dio el picorcito justo para despertarnos la curiosidad, y si teníamos alguna duda el formulario de reserva nos la disipó, pues planteaba tres opciones que nos intrigaron todavía más:

  • Rebajar interpretación de los actores.
  • Eliminar efectos de humo.
  • Eliminar efecto de luces estroboscópicas.

En primer lugar, nos llamó la atención que preguntaran acerca de si se quería disponer o no de estos detalles (nos dio la impresión de que estaba muy bien organizada) y eso de la interpretación de los actores… Así que unas semanas después (los fines de semana suelen estar bastante solicitados) estábamos ahí… Llamando a la misteriosa puerta morada.

Action House, más allá de la puerta morada

Y entonces empezó el juego, un juego en el que estuve totalmente metida durante casi dos horas, sin un segundo de excepción. Y eso para mí en una sala de escape es un lujo, pues una de las cosas que más valoro como usuaria es la inmersión. Y nosotros, en ese momento, no habíamos hecho muchas salas donde la inmersión estuviera tan cuidada desde el primer momento y hasta el último detalle. Así que cuando vimos aparecer esos ojos (los que conocéis la sala me entenderéis) ya supimos que estábamos en una sala diferente.

Desde ese momento el ritmo no paró. Nosotros nos dejamos llevar con una medio sonrisa en la cara porque no entendíamos muy bien lo que estaba ocurriendo, pero a los cinco minutos ya estábamos riendo a carcajadas. Pero si nuestro ritmo iba en aumento, el del primer actor que nos cruzamos, Jose, o sea… ¡Bruno!, empezó altísimo y siguió así hasta que volvimos a salir por la puerta. Yo que conozco algo del trabajo del actor y la energía que requiere no podía parar de pensar qué habría desayunado ese hombre, porque se dio una paliza de impresión para que disfrutáramos la experiencia.

Y también de la interacción con los actores surgió algo que me encantó: su capacidad de improvisación, de adaptarse a las reacciones de un grupo de cinco personas que toma decisiones delante de ellos y también a solas, a lo cual los actores tienen que amoldarse. Respecto a su interpretación y al trabajo del game master les doy un 10 sin dudarlo, porque Un Caso Perdido me pareció una propuesta arriesgada y, por ello, exigente para ser llevada por el camino de la trama contando con que existen diferentes puntos ante los que cada grupo puede reaccionar de manera diferente (cuando terminamos la sala, los actores nos contaron alguna anécdota de algún grupo y la verdad es que no pueden quejarse de reacciones diversas de la gente… pero qué difícil tiene que ser mantener la concentración a veces).

No puedo contar mucho más, pues como ocurre en la mayoría de las salas de escape lo que hace a Un Caso Perdido ser tan brillante es precisamente que el misterio se siga escondiendo detrás de esa puerta morada. Sólo puedo adelantar que vivimos una de las mejores introducciones a una sala de todas las que hemos hecho y que fuimos un poco puñeteros (sin saberlo) al no compartir toda la información que nos llegó por teléfono…

Ah, y que acabamos contagiándonos del amor y del odio a la fusta, siempre, no sé qué tiene, que nos encanta, y la odiamos y, en fin, que me enredo y al final…

Resumiendo…

Es una de las salas de escape que siempre recomiendo en Madrid. Para principiantes (la gente que haga aquí su primer escape room tiene que fliparlo muy fuerte), para experimentados y, sobre todo, para aquellos que todavía no han tenido la suerte de hacer una sala con actores… A mí es algo que me entusiasma, y en esta sala este aspecto es espectacular.

Ahora se enfrentan a una nueva etapa con la reforma de la trama de Un Caso Perdido para adaptarse a cómo ha crecido Action House (cuando lo hicimos, sólo tenían esa sala, pero ahora también ofrecen otra experiencia, Ratas de biblioteca). De todas formas, no me cabe duda de que seguirá mereciendo la pena, sólo por el trabajazo de su gente.

Un plus: Organizan juegos de rol en vivo en fechas señaladas, como Teatro de Ánimas para este Halloween, de 4 horas de duración. Ahí es nada. Yo estoy deseando probarlo.

Datos prácticos:

  • ¿Lo mejor? Los actores y la cuidada ambientación.
  • De 2 a 6 jugadores.
  • Precio: desde 25€/persona si sois 2 jugadores hasta 15€/persona si sois entre 5 y 6.
  • Nivel de recomendación: 10/10 (si no te importa llevarte algún sobresalto)
  • Web de Action House.
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